En un alarde faraónico de creatividad peatonal, nuestro consistorio ha tenido la feliz idea de ampliar las terrazas de los bares y restaurantes de nuestra calle principal y aledaños.
Le comemos terreno a la zona azul, esa zona donde el castigado bolsillo del contribuyente local se queda con cara de póker al no poder aparcar tranquilamente sin la presencia de los gorrillas, que dicho sea de paso, se ganan la vida honradamente, nada contra ellos, pero a costa de una doble imposición, ya que si pagamos religiosamente los impuestos de circulación de nuestros vehículos al Ajuntament, ¿Por qué hemos de pagar por aparcar en nuestras calles? Eso, con el sentido común de los mortales puesto en piloto automático, es pagar doble por el mismo servicio, ya que circular y aparcar en nuestras calles son cosas diferentes pero inherentes e inseparables e indivisibles por el mero hecho de utilizar nuestros vehículos.
Pero volvamos al tema principal. Todo se traduce en afán recaudatorio, ya puestos proponemos desde esta humilde tribuna que esa calle, nuestra calle principal, sea de acceso único y exclusivo peatonal, ya que de otra manera vemos que con la actuales actuaciones, puede producirse mas de un accidente al aparcar los coches y dar golpes a las terrazas que se están instalando. no entramos a valorar que quitamos espacios vitales para dejar los coches y no se proponen solución alternativa alguna. Como no inventen pronto el coche plegable para guardarlo en un bolsillo, estamos apañaos.
Recaudar y recaudar: Al final nos cobrarán hasta por pisar las calles y desgastarlas.........