A los que nos critican, a los que nos quieren, a los que nos incitan, a los que nunca nos hieren. A los que hablan mal de nosotros, a los que nos leen asiduamente, a lo que somos gracias a vosotros, a los justos de mente. A las mentes calenturientas, a los que nos quieren poner nombre, a cada una de las parientas, a cada uno de los justos hombres. A los que se ríen con nosotros, a los que se ríen de nosotros, a los que están con nosotros, y a los que nunca estarán con nosotros. A los espíritus constructivos, a los que no tienen ni puta idea de lo que es construir, a los críticos ácidos, a los que siempre creerán que uno más uno son solo dos. A los concienzudamente insconcientes, a los de mente retorcida, a los incontinentes, a los "lugartenientes". A los parricidas de la razón, a los pobres de corazón, a los que van sobraos, a los que nos creen atontaos. A los cívicamente incívicos, a los siempre correctos, rompamos una lanza por nuestros políticos, rompemos otra lanza por los insurrectos. A los que siempre quieren ser y nunca serán, a los mal fotografiados, a los que quieren estar y nunca estarán, a los que siempre están retratados.
En fin, gracias a todos los que nos leéis desde el inicio, y a los que os habéis sumado al carro después, lo único que pretendemos en éste espacio es informar un poquito, eso si, sin micrófonos ocultos Sr. "X", y crear un debate del que salgamos todos ganando. Todos los comentarios son bienvenidos, inclusive los ácidos con mala fe, ya que dentrás de la mala leche del que los escribe, siempre hay una persona que en el fondo, lo que necesita es que alguien le escuche y puede ser una vía de escape tan buena como otra cualquiera. Nos alegramos de poder ayudar a éste tipo de gente. Es otra manera de ser útiles a la sociedad.
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