Vaya por delante que a mi personalmente no me gustan los toros, entre otras cosas porque de ser así, tendría el mismo gusto que las vacas……………..Me parece una venganza mezquina que se gaste nuestro dinero en estas situaciones tan ridículas. Y digo venganza porque esto suena a contraofensiva por el tema del Estatut. Y digo ridículas porque en Barcelona el tema de los Toros está en fase terminal y le quedan cuatro días, sobre todo por la pésima labor empresarial que ha realizado la Familia Balañá, que según dicen los entendidos, lo ha hecho fatal en los últimos años. Es tan fácil como haber esperado en vez de dar un espectáculo tan Kafkiano. Si la empresa no obtiene beneficios, ella sola se ocuparía de no hacer más corridas de toros y…..¡ problema resuelto ! Sin tanta legislación, si no al final tendremos que poner al lado de las vallas de bienvenida a Catalunya, una segunda valla que rece: “Prohibido Prohibir”.
Y a todo ésto, que ahora no salga el lumbreras de turno diciendo de prohibir en el resto de España la Sardana, el pá amb tomáquet, el Barça y el Cava..............
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